Mia Kelly, de veinticinco, parece una modelo de Gap que cree tener la vida resuelta, pero la muerte repentina de su padre la aleja de la tranquila Ann Arbor a la bulliciosa East Village en la ciudad de Nueva York. Allí descubre el espíritu de su padre por la vida y el legado que dejó tras él con la ayuda de un antiguo café, unos cuantos amigos excéntricos y un músico encantador.
Will Ryan es guapo, poético, espontáneo y está a punto de ser famoso cuando conoce a Mia, su nueva casera, musa y rompecorazones personal.
Una historia de autodescubrimiento y amistad, Sweet Thing desvela el poder de amar y dejar ir.
Sweet Thing, #1
Primera oración: "Los
aeropuertos son las grandes fábricas de distribución de humanos y mirar a la
gente aquí puede proporcionar a un escritor infinitas posibilidades."
"El mundo como ella lo conoce está a punto de volverse patas arriba y si ella no aprende a nadar, su propia profundidad la va a ahogar"
Mia de 25 años de edad, siempre ha pensado que la música, por más que la ame, nunca le llavará a ninguna parte en la que en realidad quiera estar. Hija de dos personalidades completamente diferentes, ella siempre ha creído que es mucho más parecida a su mamá, una mujer que razona y que deja la intuición de lado, que a su padre, el hombre que más ha amado en su vida, un espíritu libre, músico nato que siempre trato de hablarle con el alma y la importancia de escucharla. Esto es hasta que él fallece y ella tiene que mudarse a Nueva York con el propósito de cuidar del café que Pops, como ella lo llamaba, tanto amaba.
"Me encantaba volar. Era un escape para mí. No había ningún lugar para estar, era rendirse al destino"
Es durante el viaje, cuando un atractivo joven, con pinta de músico desinteresado y con una mirada que parece completamente transparente, se topa en su camino, haciendo acto de presencia como su compañero de vuelo completamente neurótico por estar en un avión. El chico claramente tiene algo por los aviones, así que ella opta por hacer un poco más ameno el viaje conversando con él. Da la casualidad que ambos van exactamente para la misma zona de Nueva York, además él es un completo amante de la música, su nombre; Will.
Después de su incidente con Will, Mia da por sentado que no lo volverá a ver, pero el destino, o tal vez otra cosa, decide ponerlo en su camino de nuevo, esta vez como su compañero de departamento. Aquí es donde inicia la magia que sólo dos almas unidas por la música -y por algo más grande- pueden crear. Lástima que Mia está obstinadamente decidida a mantener su relación con Will como algo meramente platónico, disfrazando todos los sentimientos con la palabra "amistad".
"El destino fue siempre un concepto díficil de entender para mí, pero lo compraba cuendo era necesario, como en un avión o en el metro"
Sweet Thing es una novela que hará que tu piel se erice de una forma maravillosa, pero no queda solamente allí; hará que te cuestiones absolutamente todo porque además de ser un libro de amor también aborda el auto-descubrimiento en perspectivas que siempre van más allá de lo esperado. Al leerlo sentí que me transportaba a décadas pasadas donde la música se sentía en las calles y el sonido de las cuerdas de una guitarra eran suficiente inspiración. Me sentí groupie y hippie y, al mismo tiempo, me sentía completamente diferente. La música que este libro señala no podría ser mejor, clásicos de clásicos: desde Johny Cash y Bob Dylan hasta The Cure. ¡Excepcional!
Nuestro protagonista es simplemente maravilloso, es lo que yo querría y buscaría en un hombre. Él es autentico y fiel a su espíritu, alma y corazón, por no decir que tiene un lado neurótico que es completamente adorable. Mia, por otro lado es una persona que en ratos me desesperaba, al grado en que tenía que parar de leer para tranquilizarme. Es un personaje que lleva las cosas al límite en ocasiones, lo que lastima mucho a nuestro querido Will y a las personas que la rodean.
Prometo que te vas a enamorar, pero también más a maldecir,¡y mucho! Podríamos decir que es como subirte a una montaña rusa de emociones con tu mejor amigo.
Decir más sería demasiado pero al mismo tiempo siento que me faltan palabras. Tal vez tendrías que leerlo para experimentar todo por ti misma.
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