Tick, tick, tock.
Tiempo.
Eso es todo lo que me queda.
Una habitación pequeña, una fotografía, y tiempo.
Quieren que confíe en ellos y confiese mis pecados.
Me dijeron que no me juzgarían - mintieron.
Pensé que podríamos convencer
al mundo que esto no era un crimen.
Estábamos equivocados.
El tiempo no se detiene.
El reloj sigue con su tictac,
el mundo es desconfiado, y ahora...
Ahora él se ha ido.
Mirando en retrospectiva, Adisson, una chica de dieciocho años, nos narra a través de su tumultuosa mente la intensa historia de lujuria, pasión y amor vivida con Grayson. En paseos en forma de casi una prosa coloquial, nos cuenta todo esto desde el cuarto de un manicomio en el que tiene que estar durante treinta días; encerrada con nada más que una cama y una foto de Cupido reviviendo a Psique. Y finalmente, todo siempre se reduce al momento en el que sus miradas se cruzaron y el tiempo se detuvo, literalmente. Todo siempre regresa al minuto donde, por primera vez, se besaron, donde ambos cayeron profundamente en el abismo de sus sentimientos, cuando se enamoró de Grayson; su profesor.
Grayson está de regreso de un viaje por Europa para hacerse cargo de su padre enfermo y empezar a trabajar como profesor en un reconocido colegio. Con treinta dos años de edad, se encuentra nadando en experiencia, aventura e inteligencia. Sin embargo, nada lo hubiera preparado para la chica de intensos ojos azules y tentadores labios. Todo en ella grita prohibido y él es consiente de las consecuencias que acarrearía para ambos el que se vieran involucrados... pero Adisson está decidida a tenerlo -de una u otra forma- porque sólo él es quien la calma y la hace olvidar lo que la atormenta, su pasado, su familia... ella misma. En él se encuentra.
Las tácticas de Adisson para conquistar a Grayson finalmente hacen que este ceda y, ambos se ven inmersos en una relación que forzosamente tiene que mantenerse en secreto... Luchando contra tabúes establecidos, problemas individuales y una relación que, cuando menos se lo esperan, se convierte en algo más que reuniones al azar.
¡M.a.r.a.v.i.l.l.o.s.o! Me ha encantado. Cuando por primera vez leí la sinopsis no me llamó mucho la atención, tuvo que pasar un tiempo para que le diera la oportunidad. y la verdad es que no me arrepiento. Es un libro refrescante, que me vino perfecto después de alguno que otro que me había dejado con un sabor de boca amargo.
Para empezar, la historia ha sido magnifica... además tengo una debilidad con aquellas que abordan el profesor-alumna. Pensé que no iría más allá... pero me equivoqué. Los personajes son tan distintos al principio, no encajan para nada y al mismo tiempo son perfectos el uno al otro. Adisson es la típica chica popular a la que todos envidian, pero resulta ser no más que una fachada para protegerse a sí misma de su pasado y de su sufrimiento. No es un secreto que carga con la culpa de la muerte de su pequeño hermano... lo cual le ha derivado en un trastorno de estrés post-traumático que canaliza en una obsesión con el tiempo y el reloj, pero cuando ve a Grayson, por primera vez puede sentir que el tic tac que tanto la atormenta se detiene.
Sus métodos de conquista resultan ser extremos, pisando el término acosador, y aún así no puedes evitar no amarla. Es escalofriante. En cuanto a él... me encantó su fortaleza, pero que al mismo tiempo se dejara ser tan vulnerable en cuanto a ella.
Y, como regalo para todas aquellas amantes de la mitología, hay un montón en este libro. Lo que resulta en un punto a favor debido a que muestra aspectos culturales geniales, que de verdad nos transportan a galerías y museos de Francia, de Londres, en fin, de toda Europa.
Está narrado desde el punto de vista de ambos protagonistas. Amour. Y se alterna entre el presente y el pasado... Dandole un pequeño toque de misterio y de ese sentimiento de ¡quiero saber más! Un libro simple, fácil de leer, romántico pero también con una intensidad fluorescente.
¿Ya lo leíste? ¿Piensas leerlo?
